La ansiedad matemática se define como aquella condición en la cual predominan emociones negativas (aversión, estrés, temor) e incluso sentimientos de dolor y sufrimiento, cuando se requiere solucionar un problema matemático en una amplia variedad de situaciones académicas y de la vida cotidiana. La ansiedad generada por las matemáticas puede adquirir diversos grados de severidad que van desde la simple ansiedad hasta estados de fobia.
La fobia numérica o numerofobia se define como un miedo irracional a situaciones reales o imaginarias relacionadas con los números, lo cual hace que el individuo evite la situación. Numerosos estudios han demostrado que los factores emocionales pueden desempeñar un papel importante en el rendimiento matemático, y la ansiedad matemática juega un papel particularmente importante.
Cuestionarios empleados para evaluar ansiedad matemática muestran que a mayor ansiedad peores resultados en pruebas matemáticas. Una posible razón de la asociación negativa entre la ansiedad matemática y el rendimiento es que las personas que tienen niveles más altos de ansiedad matemática evitan actividades y situaciones que involucran las matemáticas, por lo tanto, tienen menos práctica, lo que reduce el aprendizaje matemático.
La ansiedad matemática también puede influir en el rendimiento académico general al sobrecargar la memoria de trabajo necesaria para procesos de aprendizaje. Es probable que las personas ansiosas tengan pensamientos acerca de lo mal que lo están haciendo, lo que puede distraer la atención de la tarea o el problema y sobrecargar los recursos de la memoria de trabajo. Por lo tanto, la carga que la ansiedad matemática y las reflexiones asociadas colocan en la memoria operativa podría ser una explicación para la disminución en el rendimiento matemático.